Me han dicho al menos mil veces, que los sueños no me llevaran a nada, que no merece la pena los problemas, las preguntas... Bueno, yo seguiré siguiendo estas luces.
¿No ves que vale la pena luchar? 
Erica miró hacía el horizonte. Estaba cansada. Cansada de que todo el mundo dirigiera su camino, y que ella no tuviera voz ni voto en su propia vida, eran muchas cosas las que estaban pasando ultimamente, todo el mundo le decía que era demasiado impulsiva. Y que un día le partirán la cara por defender a alguien que ni siquiera ella conoce. Un soplido de viento le desordeno el pelo, cerró los ojos y miro en su interior.
¿Realmente era algo malo no permitir que un idiota dañe a una persona inocente? Ella sabía a lo que se enfrentaba pero... ¿y que?
Se agarró al esquina de aquel barco, y miró como los peces se reflejaban en el agua cristalina. Se rió. Oyó una voz, era como en eco, como si alguien lo estuviera diciendo desde una cueva.
El fuerte es quien se atreve a dar la cara al enemigo, sin importar la mida ni la fuerza de este.
Miró a ambos lados. Ella juraría que había oído la voz de su padre, quien desapareció en la mar hacía 7 años y su madre murió cuando ella nació, ella se enfrento con la temprana edad de 5 años al mundo, pero en esos momentos en los que tenía que tener sus 5 sentidos alerta encontró una buena familia, pese a que ella estaba apunto de tirar la toalla y ser una víctima más de la vida.
Vale la pena ... luchar
Ahora ten el valor de decir, que no merece la pena seguir adelante, debes ser fuerte, la vida es como el mar, aveces calmada y serena y otras rebelde y tormentosa. Con cada elección, puedes cambiar el transcurso de tu vida, y cambiar domésticamente tus horizontes. Sal ahí y se feliz nunca tengas miedo de caer.