Capítulo 14: Vuelta a casa.

Empezó a caer la noche, me acurruqué en un conjunto de hojas que estaban por allí, y doble las piernas, hacía un poco de frío allí, miré las estrellas que esa noche parecían muy lejanas, y pensé en como en estos años había dejado de mirarlas de aquella manera, me invadió una profunda nostalgia, recordando aquellos años, en los que mama y yo acampábamos en quien sabe donde y nos imaginábamos que una estrella de esas era papa, quien murió en su trabajo, por extrañas circunstancias, empecé a darle vueltas a las cosas.. ¿La muerte de mi padre tendría algo que ver con la batalla épica?  Seguramente. Cuando era pequeña no tenía ni idea de nada de esto. Empecé a mirar mis manos, por si alguna cosa inusual pasaba en ellas, pero no paso nada. En ese momento me acordé en como derroté a aquel chico... Me invadió una profunda felicidad. Dejé de tener miedo que dio paso a otras sensaciones como el hambre o el sueño.
¡Hacía varias horas que no comía! Serían las 8 o por ahí , pensaba en como estaría mi madre y si estaría preocupada por mí, unas pequeñas gotas invadieron mi rostro que me impulso para dormir.

* * * *
Brr...brr...
Oía el rumor del agua y los cantos alegres de algunos pájaros, entonces abrí los ojos y me encontré con las copas de los arboles enfrontadas entre si, con los destellos del sol filtrándose entre ellas, estaba confundida, hasta que poco a poco me fui dando cuenta de mi situación.
Fui a darme una vuelta por si encontraba algo de comer, y pensé en cuanto tiempo aguantaba un humano sin comer...
Mmm... creo que eran 40 días... pero espera...el profesor Eduardo dijo que algunas personas aguantaban.... 70 días no ? Puf... Me sobra... pero... ejem... ¿Cuánto tiempo aguanta una persona sin beber? ... Creo recordar que sólo... 5 DÍAS ! -pensé
Me empecé a poner nerviosa. Si estaba allí más de cinco días sin beber agua... MORIRÍA ! De repente empecé a tener sed... PUF ! Yo soy así.
Empecé a dar vuelta y encontré alguna fruta. Empecé a oír un sonido... CASCADA! Fui corriendo hacía el ruido, sí,sí, en efecto... Era una cascada que llevaba río abajo, no sé como la anterior noche no me di cuenta de su sonido...
Solo se me ocurrían ideas suicidad sobre como regresar a casa. Pensaba en misiones descabelladas para volver, tipo impulsarme río abajo, o  intentar aprender algo sobre mi poder para ver si podía regresar a casa, pero en aquellos momentos me parecía imposible... Rompí a llorar , entonces me acordé como derroté al chico, cerrando los ojos y pensando que podía hacerlo.
Cerré los ojos y me concentré, noté como esa energía empezaba a fluir...
Pero no paso nada. Me senté en un tronco de árbol tallado, desolada pensando que nunca lo conseguiría, que todo mi esfuerzo sería en vano y que acabaría aquí perdida y al final... moriría.
Pensé en toda mi familia , en todos mis amigos en todo lo que una vez me hizo sonreír...en ese momento me parecía tan lejano...
Entonces me di cuenta, el tronco había echo un sonido raro, de eco, me extrañé y lo miré durante un rato , decidí darle varios golpe citos, sonaba a hueco, lo moví un poco y... Se abrió, allí había unas escaleras que daban como a un túnel subterráneo.
No puedo describir como me sentí en ese momento.
Empecé a saltar y correr, mientras cantaba y gritaba ALELUYA .
No sabía bien a donde conducía pero lo que fuera para salir de allí . Me metí dentro era un túnel negro y húmedo, estuve vario rato andando hasta que vi una luz.
Fui corriendo hacía ella, daba al... Vertedero de mi barrio ! No me lo podía creer, estaba exhausta pero mis ultimas fuerzas las gasté yendo hacía mi casa corriendo..
Cuando llegué vi en la ventana a mi madre llorando con Carla al lado, también estaban Natasha que estaba mirando a un punto fijo y la mirada decaída y Saimón que estaba cabizbajo y con varias heridas en la cara.
Decidí entrar a casa, mama fue corriendo hacía mi casi cayéndose y nos fundimos en un profundo abrazo.